jueves, 10 de enero de 2008

Cuando se convierte en adversario el que defiende la vida...

 10.1.2008. En Aragón Liberal

Cuando se convierte en adversario el que defiende la vida. La Iglesia esa enemiga. Por Clara Jiménez


¿Los enemigos? Unos "enemigos" encantadores.

Por: Colaborador

El PSOE ahora afirma que la Iglesia crispa porque sigue enseñando lo mismo que siempre, no "progresa" no "evoluciona" para dar otro mensaje distinto al de Cristo y al que la naturaleza humana trae de herencia. El valor de la vida, de la fidelidad, el hogar, el cuidado familiar de los hijos. ¿Por eso crispamos?


La Iglesia: esa enemiga


 
El PSOE y la Iglesia frente a frente, vierten sus desacuerdos. La Iglesia, esa enemiga consumada, defiende una verdad: la Verdad que otros no quieren reconocer. Para el mundo es difícil plegarse a una institución que predica (no siempre) con el ejemplo, pero aun así es temida porque su fortaleza es prestada y viene de Dios. Aquel Jesucristo que la fundó sobre un pescador es también hoy el "siempre presente" que sigue llamando a la redención de las almas y de los cuerpos. Jesús no obra en vano: la Iglesia, suya por querer divino y puesta a disposición de los hombres, es el instrumento de salvación. Sus leyes y sacramentos alimentan el alma y le dan vida para asumir el destino eterno. Los que la rechazan sobreviven a duras penas y se debaten en la anorexia espiritual. Siempre habrá enemigos de la Iglesia, pero nunca será tan fuertes como para vencer a Dios.
 
 
Clara Jiménez