A instancias del PSOE, se pretende que la dispensación de la PDD (píldora del día después) curse sin necesidad de receta médica.
En EEUU (Estados Unidos) se está reconsiderando la bondad de dicho fármaco: J. Standford, experto de la FDA estadounidense, afirma que la píldora del día después -con la que políticas de derechas e izquierdas se las prometían muy felices- no evita los embarazos en un 25% de los casos.
Además, añade, se oculta información: conocer sus efectos abortivos es un derecho de las usuarias que se vulnera. Estudios recientes en China, EEUU y Europa demuestran que la PDD no reduce las tasas de abortos ni de embarazos imprevistos, pues al multiplicar la promiscuidad sexual fiados de los efectos de la misma, crecen los embarazos y los contagios de enfermedades venéreas.
María Ferraz
