"Un Congreso en Roma, analiza el estatuto del embrión y desarrollo humano". Dados los abusos contra el natural derecho de todos a la vida, reconocido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos" (1948)
Leo: "Un Congreso en Roma, analiza el estatuto del embrión y desarrollo humano". Dados los abusos contra el natural derecho de todos a la vida, reconocido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos" (1948), ¿ no es verdad que es necesario y urgente un estatuto jurídico a favor de la vida de todos, en cualquier estadio de su existencia; de la vida del nacido y del que está en camino? ¿ No es verdad que el embrión debe ser protegido de la ambición de científicos sin escrúpulos, de sociedades económicas y de políticos corruptos? Han visto en él un negocio muy atractivo. Ninguna causa o interés puede justificar la manipulación de la vida embrionaria o fetal, el asesinato del embrión o el feto. Nadie tiene derecho sobre la vida de otro: ni su madre, ni su médico, ni los políticos. Todos tenemos el deber de respetar la vida; pero sólo la Iglesia, entre todas las instituciones, lo dice alto, claro, sin ambigüedades. La Iglesia, pionera en la defensa de la vida, defiende seriamente al hombre sin cansancio ni dudas. La dignidad de todo ser humano, incluido el embrión, ¿ no debería figurar en un código universal de derechos humanos? Peor que la esclavitud, la clonación; peor la destrucción de embriones que el maltrato al esclavo. ¿ Hemos avanzado socialmente? El embrión merece todo el respeto porque no es una cosa sino un ser humano vivo al inicio de su recorrido vital, como prueba la Ciencia. Un equipo de investigadores japoneses acaba de descubrir células adultas de la piel con capacidad de transformarse en otros tejidos. Las llaman Células de Pluripotencialidad Inducida ( IPS), que permitirá la curación completa de corazones infartados, etc. Ahora, la clonación, además de inmoral, tendría algún sentido, salvo las quimeras que algunos sueñan? El hallazgo del equipo de Shinya Yamanaka ha hecho que dimitan de su propósito varios científicos metidos en la órbita de la clonación; entre ellos, Wilmut, el padre de la oveja Dolly, que declara: esa línea de investigación "es mucho más interesante". Es propio de una sociedad civilizada, cuidar y amparar a sus individuos más indefensos; pero la nuestra llama progresista matarlos, con el cinismo de servir a la vida con la muerte. Por dignidad, por economía, por piedad, ¡dejen, ya, los experimentos con seres humanos aunque sean diminutos! ¿ Estaría bien quitar los ojos a los videntes para dar vista a los ciegos? Pues peor es usar un embrión humano como medicamento.
J.M. de Santiago